
Salir victorioso de algo con lo que te comenzó a trastornar un poco, a consumir de a poco y a meterse en los sueños. Ganarle a lo que comenzó por intento, luego por curiosidad, volviéndose en miedo y terminando en pasión. Agarrarle la mano a una historia que ocurrió en otro lado, con otra mente y claros, otros impulsos creo que ha sido una de las mejor experiencias que he vivido como estudiante de teatro.
Hicimos, Marcela y yo, Las Sirvientas y obtuvimos resultados provechosos que nos llenaron de satisfacción; disfrutamos como nunca y eso es lo más gratificante. En resumidas palabras, el párrafo anterior cuenta lo que viví en el proceso de crear a Solange, y vaya nunca lo olvidaré. Ojalá que nuestro proyecto de querer montar la obra completa este semestre que inicia, se concrete y lleguemos a buen puerto.
Quiero apreciar ahora, en otros personajes, los resultados de crear un ser diferente al mío. En vuelto a encontrar mi camino, me llené de energía. Sé lo que quiero más que nunca.
3 comentarios:
Oye, porque nunca puedo verte actuar...
supongo que cuando hablo contigo no estas actuando no?
eso sono un tanto bobo.
cuidate chica gemenis
mira subi un poema en mi blog comentalo...
besos
chauuu
Manuel.
Publicar un comentario