Grito

Quiero sentarme un rato, y hablar contigo. Quiero contarte que pasa, que ha pasado, que pasó y ver si podemos ver que pasará. Creo que es bueno poder vernos, mirarnos y comprender que aún nos vemos con esos ojos. Quiero dejar de oír esas palabras necias de las que siempre repites con tanta verdad e inseguridad. Quiero que por un momento seas franco.

Y tus cuentos otra vez, de no dejar nada claro, de hacerte el interesante por el simple hecho de sentirte bien. Quiero que dejes de verme como lo que no quieres que sea. Que dejes de verme así para no complicar las cosas, para no arriesgarte, para no dar un mal paso y descubrir quizás un monstruo que no existe. Y que de seguro lo sabes.

Quiero... Quiero gritarte, quiero decir lo patético que a veces me resultas con tu conducta de niño. Quiero exclamar que a veces tus conceptos de coquetería se van de los limites y dejas caos en ti y en los otros; en mi.

Quiero gritarte desde mi pecho que a pesar de todo ello. Siguen esas sensaciones de antes. Esos nudos cálidos en mi vientre. Esos pequeños saltos cuando rozas mi piel. Y esos besos imprecisos, perdidos en una ganas locas de tener otro rumbo. Y esa mirada enamorada, también. Y que a pesar de eso te veo así.

Así pasó

Se perdió...

Y se vuelve a encontrar


Vivió

sólo para morir.


Y quién crea

Si no hay más que saturación.



Y quien inventa

cuando todo se ha creado para ser destruido.


Son segmentos.




Y pasa junto a ti.

Y no dices nada.


Dejas que se arranque

que se vaya de tu vida.

A pesar de lo muy agradecido estas.


Y se va.

Se va...

Se va para no volver

simplemente frente a

tus ojos ciegos

indolentes

magnamente frívolos.


Y vagamente se irá

transformando en un recuerdo

un recuerdo que será olvido.

Un segmento de la vida

un segundo vivido

y la banal imagen de

un corredor empedernido

que creyendo encontrar su lugar

huyó de todo.

De lo que hacía bien,

De lo que hacía mal

y de aquella mujer a la que dijo

"querer" y sin saber

Temía a la quién dijo amar.


Y así dejo el tiempo pasar.


Y nada cambio en realidad.


Perdió.

Fin

Y se acabo

Geminis Oceánico

Por que de la vida a veces se hace un exceso de situaciones que te llevan a pensar.
Son los excesos que necesito para mantener mi mente ocupada en pensamientos idiotas y algo hipócritas.

Si por un momento uno de los dos sintiera lo que siente el otro, quizás lograrían comprender muchos actos o impulsos que se controlar al hecho de temer perder. Qué aferra con tantas fuerzas, sino es un cariño incierto en la pasividad de Santiago. Y es que mezclar la rutinaria ciudad con los renovados encuentros hace que todo luzca diferente.

Dejen de repetir lo que creen que ocurre con ellos. Dejen de inventar historias y acercamientos oceánicos impulsivos. Dejen de especular. Vean simplemente algo original.

Pocos lograran entender esto pero...

Una Géminis si tiene pareja, a veces diferentes o complejas, distantes o extrañamente unidas...
A una Géminis le cuesta encontrar pareja, pero si existe quien la pueda conquistar.



[Basado en el tema que sostuve con Manuel ...]

Conjunto

Se hundió en mis ojos, lo ven
sus propias pupilas
como un alma entumecida
encontrando abrigo
en la piscina tibia de mi psiquis.
Su alma se baño en la oscuridad de mi.
y su presencia movía las aguas de mi interior
rebalsando gotas de alma
que corrieron por mis mejillas.
Él se fue, dejando solo
suaves ondulaciones
que poco a poco van borrándose
borrándose,
borrándose...
Fue la tranquilidad ida,
fue el eco.

Guardad...

Son la sobredosis que genera en los músculos en movimiento repetido de sentidos abstractos. Son mezclas andróginas que proyectan miedo, y a veces son espectaculares, son majos de aspecto y peculiarmente despampanante.

Y que corre, si el camino acaba mañana. Y corre sin pensar en el después, y se aleja creyendo escapar. Respira como un pez fuera del agua, y se ahoga y quiere gritar...y quiere sentir... y quiere abrazar ... y al final se calla y se muestra rara y diferente. Son convulsiones de angustia y alegría, de pasión y temor al ridículo. Y cambios... visiones diferentes del querer decir en silencio lo que grita el alma.


Desde hoy hasta las próximas vacaciones necesita guardar lo que siente para sentir lo que debe hacer por su pasión... No quiere descuidar los músculos ni la sobredosis. No se quiere embriagar con sueños y pesadillas. Quiere juntarlos y explorarlos hasta explotarlos.

Guardad cada palabra mía hasta el final del día... guardad mi nombre. No olvidéis de mi.

...xxE

sut soded erbos im acob es nazilsed etnematnel odnaedrob im arac, odnajab atsah le edrob ed sim sohcep y odnagell a im ortnec ed recalp.

A veces querer hacer las cosas difíciles excitan más... ¿Rápido?... ¿O detallado?

Escuchó

Hace un año que nada de amor salía de sus palabras, pero sintió el impulso de derramarlas. Quiere tejer una historia de amor, un amor simple y radiante. Un amor más allá de lo físico. Un verdadero amor.

Ella a veces quiere parecer fría, seria o completamente lejana al mundo corriente. Quiere verse diferente para el resto. Para verse y sentirse más fuerte, no como una flor. Ella tiene marcas del tiempo, como todos. Pero a pesar de ello, quiere encontrar el brillo de eso que alguna vez dejó la huella. Ella es simple y tímida, ella es Anaí.

Anaí era la menor de tres hermanos, perteneciente a un núcleo algo desarmado por el tiempo y desgastado por historias y tiempo. Ella vivía sólo con su madre, quien trabajaba todo el tiempo por darle a ella, su hija y bebé, una educación digna y un buen pasar. El padre, estaba presente, pero el constante vaivén de la relación de sus padres a veces dificultaba la armonía. A veces eso le hacía temer un poco en el amor, pero jamás dejó que eso le influenciara. Con una educación normal, entretenida por sus actividades y demases, un día de marzo, cuando cursaba su último año de colegio, conoció a quién le hizo ver un colegio más bello, un invierno menos frío, una mañana más cálida; o por lo menos eso quería creer y sentir cuando vio sus ojos.

Una misma sala, bancos cercanos y ayudas de estudio hizo que ellos se acercaran y se vieran, conocieran. Sirvió para saber que él ya estaba enamorado de otra, y que nada de lo que soñó sería real, a no ser de que se la jugara todo por él. Pero ella no se atreve, pasando así todo el año, fingiendo ser fuerte, impenetrable, fría, y equívoca en sus actos lo dejó ir al final de diciembre. En la despedida, él le confesó que se sentía atraído pero que nunca nadie dijo nada, nadie hizo nada y el tiempo pasó y con ello el sentimiento. Allí murió todo, el colegio, los amigos del kiosquero, los envases de "Kapo" en el suelo y ese amor de colegio, que todos viven, ya sea dentro o fuera del él, pero en el mismo tiempo.

Anaí, resignada se quedó hasta el final de la ceremonia en la parroquia del colegio. Lloró en silencio y se fue...

Se pasaron los años y una decena de intentos fallidos. Quizás siempre con la esperanza de que él volviera alguna vez y le dijera "intentémoslo". Pero eso era tan poco probable que no le quedaba más que esperar a su amor de la vida. Anaí necesita reencontrarse, y regresa a la parroquia donde vio por última vez lo vio, lloró por amor y se fue completamente herida, como hoy había regresado al final.

Ella conversó con Dios mucho tiempo, y entregó todas sus penas. Dios sólo escuchaba. Le rogó una respuesta y finalmente musitó:

"Juro que he intentado todo. Trato de ser sincera, de ser un buen concepto de amor e intento entregarme al máximo. Trato, trato y me esfuerzo, y me reto, me odio a veces por no avanzar ni un solo centímetro. Y me digo que quizás no nací para ese tipo de amor. Y entonces recuerdo su cara y me doy un nuevo para intentar, porque es lo único que puedo hacer, intentar e intentar... todo por dejar pasar el tiempo y por cerrarme como una ostra."

A veces, Dios te da oportunidades inesperadas, quizás pruebas, ese fue el día "D" para comprender las cosas quizás. Ese día llegó él. Con cara de cansancio, se sentó atrás de ella. y oró.

Y luego se vieron las caras. Ella le habló, y el escucho algo desconcertado. El habló, ella no lo supo relacionar. Ella le quiso reclamar algo, y el respondió: " No puedes culpar al resto de lo que es un error propio. Lo sé, porque lo viví. Y si, ambos contribuimos para que dejáramos de hablar, de conocer, y vivir tal vez una linda historia, pero eso ya paso. Nunca vas a cambiar... Sin querer escuché lo que decías, y si crees que jamás podrás amar, es porque no ha llegado la persona correcta o quizás se fue frente a tus ojos. En ti, hay pocos hombres que te harán sentir, y muchos menos que te hagan sacar tu lado perverso. Menos serán los que logren descubrir tu lado de amor, y yo no lo supe hacer. No te merezco. Sé que vales mucho más que silencios y miradas cómplices, y ese sin fin de cosas típicas de los amores." Eso fue lo último que dijo, ya marchándose y perdiéndose por la puerta de la parroquia.

Ella se quedó inmóvil por un tiempo, y luego se acercó al altar, y de rodillas dijo: "Gracias por escuchar mis ruegos, por darme fuerzas y hacerme ver". Así se fue. De él no supo nada, nunca más.

Rewind

Sólo yo se que escribí antes de que no pudiera hacer público lo que pasó.

Y que alegría saber que Estas
Cerca.....

Stop

Estas cerca...



Es curioso abrir tu blog, y leer entre lineas, por una simple "parálisis" del computador, esas palabras.



La frase se creo de una deformidad rara, y me alegra saber que se formó aquel significado.



Estas cerca, lo sé muy bien. Me alegra eso. Me alegra... que estas cerca, y hasta el PC lo sabe.













[Estoy pegada con Edith Piaf.... ¿estaré enferma?]

C... Lave

Y si se fuera todo por tubo,
no se puede negar que se disfruto.
Disfrutó una vida completa de arte y magia.
Y en pocas personas se puede mencionar.


Bésate